Con el lema «Un solo Señor, una sola fe»,
durante una hora el mundo permanecerá unido en la oración y en la
adoración del Santísimo Sacramento, en unión con el Obispo de Roma. A la
Hora Santa del próximo domingo, que presidirá el Papa desde la Basílica
de San Pedro, se unirán las catedrales y parroquias de todas las
diócesis del mundo. En concreto, en la diócesis nivariense, el obispo
preside la hora de adoración eucarística en la sede Catedral de La
Laguna a las 16 horas, otro tanto se hará en algunas parroquias de la
diócesis a la misma hora y día.
El mismo Santo Padre Francisco ha presentado las intenciones de oración
para este momento importante de súplica: se rezará por la Iglesia
difundida en todo el mundo, para que el Señor la haga cada vez más
obediente a la escucha de su Palabra; y para que esta Palabra que salva
resuene brindado misericordia, consuelo, alegría y serenidad. El Santo
Padre pide también que se rece por cuantos en diversas partes del mundo
sufren las nuevas esclavitudes y son víctimas de las guerras, trata de
personas, narcotráfico y del trabajo esclavo, por los niños y mujeres
que padecen todo tipo de violencia, así como por los que viven en la
precariedad económica, sin empleo, ancianos, inmigrantes, sin techo,
encarcelados y marginados.
La cita es para las cinco de la tarde, hora de Roma, que en Rarotonga,
Islas Cook, coincidirán con las cinco de la madrugada; las diez de la
mañana, en Nueva Orleans, Estados Unidos; las once de la noche en Hanoi,
Viet Nam; y las tres de la madrugada del 3 de junio, en Christchurch,
Nueva Zelanda.